Buceando en Australia, ¿Merece la pena bucear la Gran Barrera de Coral?
Todo aquel que esté interesado en el fondo marino, ha oído hablar de la Gran Barrera de Coral de Australia.
La Gran Barrera de Coral es el conjunto de arrecifes de coral más grande del mundo y se encuentra en el nordeste de Australia, en el territorio de Queensland. Cubriendo más de 340.000 km2 y albergando más de 900 islas, la Gran Barrera de Coral es considerada el ser vivo más grande del mundo (¡se puede ver hasta desde el espacio!). Un ser vivo en el que habitan y se retroalimentan millones de especies de todos los tipos.
Por dar una idea, saber que se han avistado hasta treinta especies diferentes de ballenas y delfines en esta zona, más de 1.500 especies de peces y hasta seis especies de tortugas marinas que vienen cada año a poner sus huevos en esta zona. Por no hablar de la gran variedad de especies de moluscos, caballitos de mar y gasterópodos entre otros.
Pero por mucho que la fauna en este sitio sea impresionante, el verdadero atractivo de éste área son las más de 400 especies de corales. Corales duros, blandos, de todos los colores y a montones. Un verdadero paraíso de color y vida.
Entonces, claro que merece la pena bucear ahí ¿no?
Pues ahí está el dilema. Todo lo precioso se suele acabar explotando y, desde los años 70 la Gran Barrera de Coral ha estado librando batalla tras batalla con grandes empresas que querían aprovecharse de sus recursos.
Gracias a incansables movilizaciones locales, en 1975 el Gobierno de Australia declaró gran parte de la Barrera de Coral Parque Marino, lo que significa que la pesca y la preservación de la flora y fauna marina está estrictamente controlada desde entonces. También la UNESCO, en 1981 declaró el Parque como Patrimonio de la Humanidad, con su consecuente inversión en favor a la conservación del fondo submarino.
Pero estas medidas no han sido suficientes. La plaga de las estrellas de mar “corona de espinas” lleva destruyendo los corales durante décadas y no se ha encontrado una manera de frenar su avance. El calentamiento global ha subido la temperatura del agua notablemente y la ha acidificado, un cambio que provoca el blanqueamiento de los corales dejándolos más indefensos y frágiles.
Además, en 2016 y 2017 ciclones como El Niño destruyeron gran parte de los arrecifes cercanos a la costa, dejando el área de las Whitsundays y el norte de Cairns bastante destruidos.
Todos estos hechos combinados con la contaminación y la explotación de la Barrera de Coral por el turismo, ha supuesto hasta ahora la destrucción de más del 30% de los corales, resultando en menos vida marina y menos retroalimentación positiva.
Vale, entonces ¿No merece la pena bucear en la Gran Barrera de Coral?
Nuestro último buceo había sido en las Poor Knights en Nueva Zelanda y la verdad es que teníamos muchas ganas de bucear en Australia. Como fanáticos del fondo marino que somos, hicimos nuestros deberes antes de llegar a Queensland y, sinceramente, después de todo lo que leímos no íbamos con muchas expectativas.
Una opción que teníamos en mente y de la que nos habían hablado muy bien era bucear en Lady Musgrave., situado a la altura de Agnes water. De Noviembre a Enero las tortugas marinas vienen aquí a poner sus huevos y el resto del año muchas se quedan por la zona. Desde luego esta zona atractivos tiene, lo malo está en que, al ser el inicio de la barrera de coral, suele haber bastante gente. Para evitar multitudes es mejor ir a Cairns o Port Douglas, al norte de la isla.
Una vez ahí, lo ideal hubiese sido hacer un liveaboard de tres o cuatro días. Ésta opción es la mejor para sacar el máximo provecho a la Barrera, pues te llevan al Outer Reef y cerca del Mar de coral, donde los arrecifes están mejor conservados. Pero quizás quieras reconsiderar esta opción si te mareas a bordo (el pacífico se pica muchísimo y el barco se mueve bastante) o si vas con un presupuesto ajustado.
Nosotros al final no lo hicimos, pero conocemos a gente que volvieron contentos y vieron bastantes cosas. ¿Por qué no lo hicimos? Para empezar no somos muy fans de los barcos que se mueven sin mesura, y sólo imaginarnos cuatro días en uno, nos entraba náuseas. Pero lo que más nos influyó fue que después de Australia nos íbamos a Indonesia, donde el buceo es buenísimo y lo tienes a mitad de precio. Pero tampoco queríamos irnos sin ver con nuestros propios ojos en qué estado real se encuentra la Gran Barrera de Coral, así que contratamos un tour de un día con un speedy boat que nos llevó a tres arrecifes diferentes del Outer Reef.
Experiencia buceando en la Great Barrier Reef
Contratamos nuestra excursión con la compañía Silverswift, una de las pocas que te llevan en un día al Outer Reef. Era la única que encontramos que nos llevaba a tres localizaciones diferentes y los añadidos como la comida a bordo tenían muy buena pinta. Podías hacer inmersiones o snorkel, y en ambas opciones tenías instructores en todo momento.
El viaje hasta allí... pues fue una aventura. La tripulación no se cansa de repetir que el barco se va a mover, que el pacífico lleva corriente fuerte y que el barco coge mucha velocidad. Nosotros nos tomamos la Biodramina obligatoria y tomamos todas las medidas “anti-mareo” que conocíamos pero no lo pasamos que se diga bien. Tampoco ayuda estar rodeado de gente vomitando pero bueno, estábamos prevenidos.
Después de una hora y pico llegamos a nuestro destino. Los arrecifes que visitamos fueron el Flynn, el Milln y el Thetford, que por lo que habíamos leído son de los que están mejor conservados.
Debido a los corales, las inmersiones no son muy profundas por lo que no necesitar tener el Advanced Course ni tener mucha experiencia buceando. Eso si, ¡no te separes de tu compañero/a!
Los primeros minutos de inmersión nos parecieron bastante normales pero poco a poco el color empezó a aparecer. Vale la pena recordar que, con tanta información que nos habíamos leído acerca del estado de los corales, íbamos con pocas expectativas por lo que nos sorprendimos muy gratamente con lo que vimos.
Quizás no se ven bloques de corales sanos intactos, pero hay zonas grandes llenas de vida. El blanqueamiento de los corales también es notable, pero menos de lo que nos imaginábamos. Vimos multitud de especies de peces de todos los tamaños (entre ellos el famoso Nemo), morenas, cangrejos y bastantes tortugas marinas.
Consejos viajeros: Si tienes pensado bucear o hacer snorkel en la Gran Barrera de Coral
Bucear o no en la Gran Barrera de Coral al final depende de tres variables: el dinero que dispongas, tu experiencia buceando y tu tolerancia a los barcos.
- Si no te mareas y vas más relajado con tu presupuesto nuestra recomendación es que ADELANTE, los arrecifes están mejor de lo que te cuentan y seguro que ves cosas interesantes.
- Si tienes un presupuesto flexible y tienes experiencia buceando, recomendamos el liveaboard de al menos tres días. Hacer un crucero de menos tiempo estaría “bien” pero lo que ves es muy parecido a lo que ves en otros sitios del mundo.
- Si vas un poco apretado de dinero pero quieres ver con tus propios ojos la barrera de coral antes de que se ponga peor, opta por tours de un día lo más lejos posible o vete a los arrecifes del sur como Lady Musgrave.